¿Qué hay detrás de mis quesos?
“La Quesería de la Tía Maritxu es mi proyecto personal. El proyecto de una madre empeñada en que sus hijos vivan rodeados de quesos y ovejas como lo estuve yo.” María Cilveti
Mi tributo
El nombre de la quesería es un pequeño homenaje a mi tía Maritxu y a todas las mujeres que como ella, calladamente, hacían el queso en la cocina de todas las casas de nuestros pueblos.
La quesería de la tía Maritxu es un tributo a la simplicidad de sus útiles y a la sabiduría de sus métodos de fabricación.
Mi pasión
Crecí entre quesos.
Disfruto elaborándolos. Dándoles vida. Plasmando todo lo que conocí en mi casa y todo lo que he ido aprendiendo de otros queseros.
Y…crecí entre ovejas.
Así que conozco el esfuerzo que hay detrás de cada litro de leche y procuro cuidar mis animales como vi hacerlo: mimando las crías, respetando los tiempos y dejándoles que busquen su alimento en el exterior siempre que la climatología lo permite.
Mi rebaño
Mis ovejas son unas ovejas rústicas, perfectamente adaptadas al medio.
Raza latxa, cara negra, con cuernos. No muy usuales.
Ovejas que saben aprovechar las praderas del valle en invierno y los pastos del puerto en verano.
Ellas son, en realidad, las protagonistas de la quesería de la tía Maritxu.
Aportan la materia prima esencial de nuestros quesos, la leche y su estrecho vínculo con el entorno nos amarra al origen.
Mi tiempo
Detrás de mis quesos también está mi tiempo.
El tiempo que dedico a unos procesos de elaboración mimados donde a cada queso se le da los cuidados que precisa en cada momento.
El tiempo que requieran las bacterias, levaduras y mohos para transformar poco a poco el queso.
Sin prisas. Sin la rigidez y estandarización de los procesos de elaboración de hoy.